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Comprar una consola es simple, y es por ello, que quizás tanta gente decanta por ellas, en vez de por un ordenador gaming. Y vamos, que no solo se trata de elegir un bonito case, y hardware potente, porque todavía tenemos un problema latente: el cuello de botella.
De hecho, se trata de un inconveniente con el que muchos de los jugones vivimos, y ni siquiera nos damos cuenta. Lo peor del caso, es que desaprovecha los recursos de nuestro hardware, haciendo que nuestros juegos corran fatal.
En este artículo, os vamos a enseñar a detectar, y a solucionar el cuello de botella de una vez por todas con diferentes métodos ¡Vamos alla!
¿Qué es el cuello de botella en PC?
Antes de empezar a empaparnos en la materia, es importante conocer bien de qué va el cuello de botella en PC, y cómo funciona nuestro ordenador.
En sí, el término nace como un concepto sencillo productivo, pero es aplicable a muchos otros ámbitos de la vida. Y es que, pongámoslo simple: ¿Qué sucede si llenas una botella de agua y luego la volteas sin tapa?
El agua se libera, sí, pero no con una buena velocidad. La mayoría se queda estancada, y en cola esperando a que se desocupe la boca de la botella. No es como si tomásemos un cubo de agua, que en un segundo saldría toda.
Prácticamente lo mismo sucede cuando algunos componentes de nuestro ordenador cuando la potencia y rendimiento no se encuentran en sincronía.
Generalmente, cuando se trata de ordenadores, los cuellos de botella pueden ser causados principalmente por CPU y GPU, aunque también puede pasar por un disco duro o una memoria RAM muy lenta, o de poca capacidad.
En sí, los cuellos de botella se generan cuando la carga otorgada a uno de los componentes de nuestro ordenador es demasiado pesada para el mismo, pero otros pueden cumplir muy bien con su cometido.
Como resultado, no estaremos utlizando la totalidad de los recursos de nuestro ordenador, lo que puede originar lentitud en el sistema, tirones y atascos.
¿Qué puede causar un cuello de botella?
Ya hemos mencionado los elementos que pueden estar involucrados con cuellos de botella, pero no hemos hablado más en detalle sobre porqué sucede en cada caso. Veamos:
CPU y GPU
Como comentábamos, generalmente suele ser la más común, y además la de mayor impacto de cara a videojuegos. Sucede cuando el procesador es mucho mejor que la gráfica o viceversa.
Lo que causa esto, son tirones, y que uno de los dos elementos no rinda en su totalidad. Principalmente, si se trata del procesador, el que no está dando la talla a la gráfica.
Si consideramos que la gráfica y CPU van de la mano en la gestión de datos audiovisuales, pues es probable que tengamos fallos problemas de rendimiento.
Memoria RAM
La memoria RAM es donde se almacenan las «órdenes y datos temporales» de los programas que usas día a día. Por esta justa razón, es que se trata de un elemento muy importante, principalmente para multitareas.
Por ejemplo, dentro de Windows, donde se ejecutan muchísimos proceso a la vez, es necesario contar con suficiente RAM para los programas y juegos. En caso contrario, no es raro toparnos con un cuello de botella que nos cause tirones.
Disco Duro
El disco duro en sí no es un verdadero causante de cuellos de botella en la mayoría de casos, aunque puede darse, principalmente cuando se trata de juegos que generan datos de golpe mientras se juega. Un ejemplo de esto, es Minecraft.
Cada que te acercas a los límites de lo generado, se deberán generar chunks, que en sí no son más que porciones de terreno, que para tu ordenador se traducen como datos.
Cuando se trata de datos, la velocidad es sumamente importante, y hoy en día los discos duros (HDD) son insuficientes al alcanzar apenas unos 140 MB/s. Lo ideal es contar con un disco SSD.
Disipación del calor
Los equipos mal refrigerados tienden a rendir muy mal. Esto se debe a que la potencia se reduce para evitar daños o incendios en el equipo, lo que causa una baja de rendimiento.
Lo ideal es contar con un sistema de refrigeración o ventilación mínimamente decente, donde el aire circule correctamente. De lo contrario, nuestro procesador podría estar rindiendo menos de lo debido, lo que puede generar cuellos de botella que nos generen malas experiencias.
Cómo saber si tenemos cuello de botella en el PC
Existen diferentes métodos para detectar un cuello de botella en el ordenador. Veamos:
Usar una calculadora de cuellos de botella
La manera más simple e interesante de medir el rendimiento general de nuestros dispositivos, y conocer si existe un cuello de botella, es usando una calculadora especializada para el tema.
Lo único que tenemos que hacer es ingresar a la web de Bottleneck Calculator, e introducir los datos relacionados con nuestro ordenador, como lo son el procesador, gráfica y RAM.
El sistema generará sus propios cálculos, y nos dejará información sobre la posibilidad de existir cuello de botella. Por ejemplo, durante una prueba que hicimos donde hemos unido un procesador i3 de segunda generación junto a una gráfica Nvidia Geforce RTX 2080 Ti, claramente se generará cuello de botella, porque se trata de una gráfica demasiado avanzada para un procesador tan antiguo.
Esto nos da un resultado de un 100% de posibilidad de cuello de botella:
Medir el rendimiento in-game
Otra opción que tienes a la mano para detectar cuellos de botella en el ordenador, es medir el rendimiento dentro de juegos o al ejecutar aplicaciones que exijan mucho.
Para ello, necesitaremos un medidor de recursos. Existen muchos, pero actualmente uno de los mejores es MSI Afterburner. Lo que haremos será descargarlo, instalarlo y activarlo.
Luego, solo queda empezar a ejecutar un juego, y verificar el rendimiento del CPU, gráfica y RAM. Lo ideal es que haya cierta armonía en el uso de los recursos. Por ejemplo, si el CPU alcanza picos del 100%, pero la gráfica apenas va a 50%, tienes cuello de botella. Lo mismo sucede con la RAM.
Recuerda que pueden haber picos cada cierto tiempo que exijan mayor cantidad de recursos a ciertas piezas de hardware de tu ordenador, pero lo ideal es que exista armonía entre estas.
Cómo solucionar el cuello de botella
La única forma de solucionar el cuello de botella en PC es armonizar los componentes que se encuentran dentro de ella. Podemos probar a retirar un elemento, e intercambiarlo por otro, para así mejorar esto, y aprovechar todos los recursos al máximo.
Por ejemplo, si tuviésemos un procesador menos potente que nuestra gráfica, podríamos probar a reemplazarlo por uno que tenga potencia adecuada.
